Por fin nos decidimos a montar un rocódromo en el gimnasio. Primero conseguimos unos tableros MDF que tuvimos que agujerear y colocarle unas tuercas de araña por detrás. Después colocamos unos listones de madera para que apoyen en la pared y el tablero quede hueco.
Para poder anclar los tableros en la pared hacemos unos agujeros y colocamos unos tamices con taco químico.
Ahora ya se pueden anclar definitivamente los 12 tableros. Habrá que hacer algún ajuste para que todos queden al mismo nivel, ya que la pared non es regular.
Una vez conseguido, procedemos a darle una mano de imprimación para luego poder decorarlo a gusto.
Ahora dibujamos las siluetas de lo que queremos pintar, con la ayuda de un proyector y procedemos a pintar el color de fondo de cada uno de los tableros.
Una vez pintados, toca empezar con los dibujos, que aún se pueden ver. Habrá que ser cuidadosos con el pincel...
Poco a poco va tomando forma y color. Lo que es seguro es que va a quedar un rocódromo muy colorido.
Este es el resultado final. Ya sólo queda colocar las presas de modo que podamos crear rutas de diferente dificultad.
Y listo! Una vez colocadas las mismas, nuestro alumnado ya puede disfrutar de unas buenas sesiones de escalada,
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