Finalizadas las pruebas DAFIS, procedemos al análisis de los resultados de los IMC y, al mismo tiempo, intentar hacer alguna comparativa con los resultados del año pasado.
En la anterior valoración obtuvimos que un 13% de nuestro alumnado presentaba índices de obesidad y un 48% de sobrepeso, lo que constituyó uno de los principales motivos por el que decidimos poner en marcha un Proyecto Deportivo de Centro para, principalmente, aumentar la carga de actividad física diaria de nuestro alumnado.
En esta valoración obtuvimos unos resultados bastante similares, un 13% de obesidad y un 46% de sobrepeso. Apenas se produjo una pequeña mejora en los casos de sobrepeso. Estos resultados no son muy diferentes de lo esperado puesto que, a pesar de tener un proyecto deportivo en marcha, acabamos de empezar. Además llevamos poco más de un mes con A Milla da Curuxa que es la principal herramienta de incremento de la carga de actividad física diaria en nuestro alumnado.
Si comparamos los valores numéricos del IMC del alumnado de 2º de educación primaria a 6º de educación primaria (descartamos 1º de educación primaria y el alumnado nuevo porque no tenemos datos del año anterior) su valor se incrementó en 22 sujetos, se mantuvo igual en 38 y disminuyó en 20, sin tener en cuenta que esto suponga un cambio en la categorización de obesidad, sobrepeso y peso normal.
Sin embargo, hay algún dato esperanzador. Si tenemos en cuenta los cambios en la categorización, de los 9 sujetos que experimentaron cambio, 7 lo hicieron positivamente, es decir, pasaron de obesidad a sobrepeso o de sobrepeso a peso normal. Tan solo 2 cambiaron de modo negativo.
Por otro lado, si analizamos los sujetos que están al límite de cambiar de categoría positivamente, es decir, que si su IMC descendiese un punto pasarían de obesidad a sobrepeso o de sobrepeso a peso normal, el año pasado teníamos un 5% y este año tenemos un 10%.
En la próxima valoración del mes de junio podremos ver si las diferentes medidas del proyecto deportivo, especialmente A Milla da Curuxa, tiene algún efecto positivo en estos parámetros. En caso de no ser así, también tenemos que tener en cuenta que la milla produce otros efectos beneficiosos en nuestro alumnado, y que, en estos parámetros, también influye considerablemente la alimentación, por lo que no sería un fracaso.
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